LA MÁQUINA

DEL PANARABISMO AL FUNDAMENTALISMO ISLÁMICO

Tras la descolonización, los líderes musulmanes fomentaron el panarabismo: conciencia de que los países islámicos forman una nación, que colaboran entre ellos y formar una unidad política.

En algunos países (Siria, Irak o Egipto) los gobiernos promovieron reformas para estimular el crecimiento económico y la modernización social. Promovieron la educación, la sanidad y nacionalizaron empresas de propiedad extranjera.

Un ejemplo de líder panarabista fue Nasser durante 1950-60 (presidente de Egipto). Las derrotas frente a Israel y las transformaciones que no funcionaron, supusieron el final del panarabismo y la reaparición del islam.

 

LA OPOSICIÓN A OCCIDENTE

El apoyo de los países al Estado de Israel y las intervenciones militares fueron criticadas por numerosos países de religión musulmana. Se creó un sentimiento antioccidental, que rechazaba sus actuaciones políticas y se oponían a su estilo de vida consumista.

Los grupos fundamentalistas promovieron insurrecciones en algunos países musulmanes. En 1979, en Irán, los seguidores del ayatolá Jomeini derrocaron al régimen dictatorial y proccidental del sah; y en Argelia, el gobierno del Frente de Liberación Nacional, izquierdas, tuvo que hacer frente a la insurrección armada de grupos islámicos radicales.

El fundamentalismo islámico se basa en la subordinación de la vida pública a la vida religiosa, la aplicación de Corán y sus preceptos y el cumplimiento de la ley islámica o sharía como norma de conducta social. En las últimas décadas, su fuerza e influencia han aumentado en numerosos países a medida que se agudizaban las diferencias sociales o se incrementaba la oposición a EE UU.

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DIVERSIDAD DE OBJETIVOS Y ESTRATEGIAS

El islamismo no es homogéneo, puedes encontrar:

• Grupos islamistas tradicionales: aspiran al uso de la ley coránica. No tienen activismo político.

• Grupos fundamentalistas: buscan tener el poder político para implantar una ley coránica.

• Grupos radicales yihadistas: surgen en zonas rurales que plantean la yihad (guerra santa contra los no creyentes) usando la violencia para lograr sus objetivos y muestran rechazo al mundo occidental.

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LA PRIMAVERA ÁRABE

 

La crisis económica mundial iniciada en 2007 sumió a los países musulmanes del norte de África y de oriente medio en una pobreza extrema, con altas cotas de desempleo y con un gran incremento de precio de los alimentos y otros productos básicos. A los problemas económicos se unieron también políticos: gobiernos corruptos y autoritarios y ausencia de democracia real.

A partir de 2011, los grupos islamistas incrementaron su influencia y el estallido social, las manifestaciones masivas provocaron revueltas populares y cambios de gobierno en países de mayoría musulmana. Fue gracias a la rápida comunicación a través de Internet y de las redes sociales por lo que estos movimientos se extendieron con rapidez

Estos movimientos han resultado en duros enfrenamientos y en el avance del islamismo radical en muchos países. Solamente en Túnez se ha consolidado un régimen democrático. En Egipto, las revueltas del 2011 forzaron la dimisión de Mubarak y las elecciones dieron el poder a los islamistas.

En 2013, el intento del nuevo gobierno de establecer nuevas leyes basadas en la tradición musulmana provocó un golpe de Estado militar

Actualmente, podemos ver varios conflictos relacionados que siguen sin resolverse: En Libia, el derrocamiento de Gadafi desencadenó una situación de violencia y en Siria, las protestas contra el gobierno de Bashar al-Asad derivaron en una terrible guerra civil aún presente.

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